“Most first dates are like job interview with cocktails. I think I am done.” (Carrie, sex and the City, la biblia de las Fab four)
Anoche a las 22 hs nos encontramos con Martín bis en un bar.
En la foto, si bien estaba de lejos, se lo veía un buen pibe, ningún Brad Pitt, pero la verdad tampoco estoy buscando eso.
Arreglamos en el café de la calle Armenia que me queda bárbaro (sí, el mismo adonde fui con Rolo), y llegué antes. En las citas a ciegas me gusta un poco esto de estar antes, (no se porque odio el venir caminando, siento que el otro me da mirada rayos x), y además me pongo a mirar a todos lados tratando de identificar segundos antes al protagonista.
De repente pasa uno de rulos (que tengo con los rulos! Dios! Algo edípico?), y lo miré, porque se parecía al de la foto, pero siguió caminando. A los 2 segundos me suena el celular y le digo,”si, estoy acá en la mesa al lado de la barra”, y vuelve rulos. Era él nomás.
La cita fue agradable, noté su satisfacción en el primer escaneo de miradas que se dan siempre los dos participantes del experimento, y me relajé. Martín es economista, tiene 1 año menos que yo, master en el exterior, un pibe brillante, docente en
Martín me gusta como persona, quisiera conocerlo más, y me acaba de invitar al teatro hace 10 minutos por sms. Le dije que sí obvio. Pero la química todos sabemos es algo fundamental. Y no me produjo “el relámpago”. Sé que a veces surge como un tibio rayo de sol. Pero con Martín uno, (que by the way no apareció), sí me provoca ese deseo. No es suficiente con “ser buenos” para encontrar el amor, no?
Pienso en mi ex Juan, que no es buen tipo, y está acompañado.
Pienso en mi primer novio, casado hace años.
Pienso en Javier, mi segundo novio y con el que casi me caso, que, ha hecho las cosas más juzgables éticamente en una relación, y hoy está conviviendo y esperando a su primer hijo con una típica mosquita muerta.
En estos días de búsqueda, reflexiono mucho. Pienso también en la típica frase de “eso no se busca”, “se encuentra”, fundamento de este blog, y espero no estar equivocada. Creo firmemente que uno es actor y motor en su propia vida.
Espero seguir creyéndolo porque le pongo mucha onda.
Mañana sale teatro.